sábado, 18 de octubre de 2014

(ARA1) La Educación Prohibida


Ayer vi el documental (Quien dice ayer, dice en dos veces, la mitad hace dos semanas, la otra mitad esta noche, dada la escasez de tiempo de la que disponemos los alumnos del máster). Por fin he visto el documental «La Educación Perdida». Hoy toca comentarla un poquito.

Este es el trailer.


Comentario

Bueno... La verdad es que plantea un cambio de paradigma absoluto con respecto a mi entender de la educación reglada. Elimina de un plumazo eso de «reglada»... Es complicado explicar las sensaciones que he ido sintiendo al ver el documental. Bueno, quizá no tanto... frustración, desilusión y... esperanza.

Pero mejor voy paso a paso, ¿no? Viendo el avance queda claro de qué va el largometraje, pero no te puedes hacer una verdadera idea del calado de las ideas propuestas hasta vistos al menos quince o veinte minutos. La propuesta que hacen es cambiar radicalmente el sistema educativo, eliminando la escuela como la conocemos hoy.

Una de las primeras aseveraciones que se hacen en el vídeo es que «no es el estudiante el que fracasa, es el sistema el que está mal enfocado». Y no puedo decir que no estuviera de acuerdo con esto ya antes de este instante, pero es que siguen diciendo verdades que ya sabía y sobre las que no había reflexionado en conjunto:
  • «solo importan los contenidos formales»
  • «el aprendizaje es preventivo» (siendo la respuesta de los profes, cuando preguntan los niños "¿esto para qué sirve?": "algún día lo podrás aplicar")
  • «la gente educa para la competencia, que es el principio de la guerra»
  • «cualquier idea que se promueve con el discurso es incoherente con lo que enseña el sistema»
  • «es una cárcel» (refiriéndose a la escuela)
  • «lo de la escuela no es educación, es adiestramiento canino»
  • «la educación pública, gratuita y obligatoria (nace en) el Despotismo Ilustrado»
Y otras muchas cosas
que revuelven mi sistema de creencias. Plantear la educación como algo que ayude a la formación integral del alumnado, no es nuevo. La cuestión es que la propia educación debe ser también integral, debe incluir multitud de tareas muy variadas y que den opción a los niños a elegir qué aprender en cada momento. Teniendo en cuenta la importancia de la motivación intrínseca, teniendo en cuenta que unos conocimientos llevan a y vienen de otros, será cada alumno quien vaya formulando su currículum y quien se vaya dando cuenta de qué necesita saber y aprender, de en qué grado de aprendizaje se encuentra. Se acaba así, también, con las evaluaciones, pues no se separa a los niños por edades, sino por intereses y conocimientos. Los que más saben de una cuestión pueden ayudar a los que saben menos y, es en esa convivencia, donde aprenden a vivir con los demás, a respetarse unos a otros, a quererse y a imponerse normas consensuadas y autodisciplina. En este mismo ambiente los niños se vuelven autodidactas los maestros y los profesores son guías que proponen (no imponen) actividades y que ayudan a desarrollar aquellas que los alumnos deciden ejecutar.

Lo más bonito de este modelo (en realidad «estos modelos») de enseñanza, es que no pierden de vista esa clave que es que los niños son personas, seres sensibles, con sentimientos, y que serán ciudadanos, que deberán ser participativos y que deberán ayudar a construir aquel mundo que consideren mejor.

El modelo en sí me encanta. Pero he de investigar un poco más, ya que en el largometraje no se explica hasta qué punto adquieren suficientes conocimientos como para hacer luego un bachillerato tradicional o una carrera universitaria. Cómo los niños educados en escuelas Montessori pueden ser luego médicos, ingenieros o periodistas.

Veo fantástico este paradigma para la educación infantil y primaria e, incluso, para parte de la secundaria. Pero veo complicado profundizar en los conocimientos técnicos y filosóficos si no se imparte una educación como la pública.

Insisto en que he de investigar un poco más, leer sobre alguno de estos modelos y ver cómo solventan estas cuestiones. Por lo demás, me parece interesantísimo establecer el debate, pensar sobre la forma ideal de enseñar a los niños y a las niñas. La responsabilidad de enseñar a futuras generaciones es muy grande y las ganas de hacerlo (bien) cada vez mayores.

Aquí puedes ver la película completa:


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